martes, 8 de abril de 2008

Tres(1)

Cuando se despertó, sintió lo mismo que sentía cada mañana, pero esta vez su compañero dormía en la cama de al lado. Entró al baño y se vio ante la posibilidad de elegir toalla, y sonrió. Al acabar de vestirse con la ropa que más le gustaba de aquél día, agarró del pie a su compañero y lo despertó. Anotó el día en la pared y se sentó a esperar. Ambos salieron de la habitación con una pieza nueva de música clásica sonando sobre sus cabezas. Recorrieron el pasillo, bajaron la escalinata y entraron en la sala cuadrada. Esperaron unos minutos y apareció el jarrón.

- ¿Otro jarrón? ¿Es que vamos a estar pintando jarrones toda la vida?

- Ya te lo dije el otro día, Alan, aquí se pintan jarrones. Es lo que se hace ¿no?

- ¿Cómo que “aquí se pintan jarrones”? ¿Y si no quiero pintar jarrones? ¿Y si no me creo todo este rollo de los cabrones de blanco y me quedo aquí sin hacer nada?

- Eso es lo que hizo mi anterior compañero, Alan. Y se lo llevaron ¿no?.

- ¿Si? Pues ya está. Esa es la forma de salir de aquí. Quedarse quieto a esperar. Alguien vendrá a sacarme de aquí. Si ven que no valgo para esto, que me lleven a otro lugar, seguro que es mejor que este sitio.

- No lo entiendes ¿no?, Aquí o se pintan jarrones, o se pintan jarrones. Cuando mi compañero dejó de trabajar, vinieron a decirle que pintara, y como se negó, lo llevaron a una sala oscura. Luego lo trajeron, ¿no?, y él volvió a negarse. Entonces lo mataron. ¿Ves esas escaleras que hay en las paredes aquellas de allí?- Ángel señaló a las pasarelas blancas que había a lo largo de la bóveda.- Por allí aparecieron hombres de esos que visten de blanco, y bajaron hasta aquí. Le dispararon a bocajarro. Y se lo llevaron ¿no?, se lo llevaron bien muerto.

Alan frunció el ceño y se quedó mirando desafiante a Ángel. Levantó la vista y observó las escaleras que recorrían las paredes. Luego se acercó a la mesa y cogió un pincel. Miró la fotografía que acompañaba al jarrón. Un caballero rojo y una montaña azulada. Aquello no le gustaba lo más mínimo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

mikel!!
esta porcion de historia no me ha llenado lo suficente ehh..podrias darme uno de tus hojaldres con tortilla de la tarongeria que me he quedado con hambre de mas!!

xq hay tanto americano que entra en tu blog?o mejor dicho...
cuanto le pagas a cada uno para q entren y que de la impresion de ser éste un blog internacional?

reivindico mi parte